Es su segunda novela después de El Tigre, relato de juventud, que tardo mucho en conseguir que se la publicaran.
Trata una historia muy interesante: la del SOE, Special Operations Execitive, un servicio creado por Winston Churchil en 1940 despues del desastre de Dunkerque.
Consciente de que no
podría enfrentarse a los alemanes frontalmente con un ejército regular, había
decidido valerse de la guerra de guerrillas para combatir desde el interior de
las líneas enemigas. El Servicio, bajo dirección británica, reclutaba a extranjeros en la
Europa ocupada, los entrenaba y los formaba en Gran Bretaña, y después los
enviaba puntualmente a sus países de origen, donde pasaban desapercibidos entre
la población local, para llevar a cabo operaciones secretas en la retaguardia
enemiga: información, sabotaje, atentados, propaganda y creación de redes. diferentes secciones encargadas de las operaciones en los diferentes
países ocupados. Francia contaba con varias, a causa de sus distorsiones
políticas, el protagonista de la novela se había integrado en la Sección F, la de los franceses
independientes no ligados ni a De Gaulle -Sección DF-, ni a los comunistas
-Sección RF-.
El 6 de junio de 1944,
con un día de retraso por las condiciones meteorológicas, los Aliados activaron
la Operación Overlord, que llevaban preparando diez meses
La Resistencia, alentada
por la cercanía de la batalla, se enardeció. Y mientras los ejércitos
británico, americano y canadiense se aprestaban a enviar a un millón de
soldados a las playas de Normandía; mientras el SAS británico -el Special Air
Service-, elegido finalmente en vez del SOE para marear a los servicios
secretos alemanes, lanzaba en paracaídas a centenares de soldados de trapo
lejos del lugar del Desembarco, las redes, en las afueras de las ciudades o
desde los maquis, saboteaban las vías de tren para impedir el desplazamiento de
las tropas alemanas por el país.
Las playas de Normandía
conocían intensos combates. A través de las ondas, la BBC difundía la llamada
del general De Gaulle a la Resistencia
El Desembarco incendió Francia; las redes se mostraban
mucho más eficaces de lo que los Estados Mayores aliados habían previsto: las redes
del SOE, guiadas por Londres; las redes de la Francia libre, guiadas por Argel;
pero también civiles que tomaban parte en el esfuerzo de guerra mediante actos
de sabotaje espontáneos a lo largo de todo el país.
El caso más sangriento
tuvo lugar en junio, días después del Desembarco. La 2.ª División SS Das Reich,
que se dirigía desde la región de Burdeos a unirse al frente normando, se
detuvo en el pueblo de Oradour-sur-Glane, después de sufrir enfrentamientos con
las Fuerzas Francesas del Interior, las FFI. Reunieron a los habitantes en la
plaza del pueblo; los hombres fueron fusilados, y las mujeres y los niños,
encerrados en la iglesia y quemados vivos. Hubo más de seiscientos muertos
En ocasiones, franceses libres o comunistas se negaban
a seguir las órdenes del SOE, cuando era él el que los había armado: cada uno
esperaba las consignas de su propio campo, las FFI querían tener el beneplácito
de Argel y los FTP, Francotiradores y Partisanos franceses, el de su partido
antes de disparar armas entregadas por los ingleses. Pero como esas mismas
redes habían destruido las infraestructuras de comunicación, era difícil pedir
o recibir órdenes.
El avance de los Aliados
en Francia era imparable, pero aunque las operaciones militares conducirían con
seguridad a la victoria, no lograrían borrar los antagonismos entre Aliados y
franceses. Las relaciones eran tensas. Los franceses libres habían sido
apartados de los preparativos de Overlord, y De Gaulle solo había tenido
noticia de la fecha del Desembarco en el último momento
Al mismo tiempo, había
entendido que aquello no era ninguna garantía para que Francia pudiera
recuperar el control sobre su territorio tras la liberación, y había sufrido un
ataque de cólera contra Churchill y Eisenhower, negándose incluso, durante la
puesta en marcha de Overlord, el 6 de junio, a pronunciar su llamada a la unión
de todas las fuerzas de la Resistencia por la radio. Finalmente, se resignó a
hacerlo más tarde, por la noche
El 15 de agosto se puso
en marcha la Operación Dragoon; las fuerzas americanas y francesas desembarcaron
en Provenza desde África del Norte
El grupo SOE/SO había llegado a un acuerdo con la
Francia libre sobre el destino de los agentes franceses del SOE: podrían volver
a la vida civil en Francia sin preocuparse, o bien integrarse en el ejército
francés con idéntico grado al obtenido en el Servicio
Destacar:
-No vayan a creer que la
guerra, ni siquiera la más necesaria, ni siquiera la más justificada, no es un
crimen. Pregúntenles a los soldados de infantería y a los muertos. ERNEST
HEMINGWAY, Introducción a Treasury for the Free World.
-Envenena la sangre y se transmite de padres a hijos, durante
generaciones, y eso hace que no exista un fin, que los combates sean vanos. Qué
importa matar al enemigo si no se termina con su instinto de odio.
-El valor no es no tener
miedo: es tener miedo y a pesar de ello resistir
Para mi es una muy interesante novela, por entretenida y por haberme ilustrado sobre un tema que desconocía.
Titulo original " Les derniers jours de nos Pères" Publicada en 2012.
Traduccion al español por Juan Carlos Durán Romero.